Le habían dedicado muchas horas a decorar triciclos y sillas de ruedas, por lo que en DisCamino estaban especialmente ilusionados con poder desfilar con ellas en la Cabalgata de Reyes y poder lucirlas. Una de las cosas que más ilusión les hacía a sus usuarios es lanzar los caramelos a los niños. La lluvia lo impidió. En la alternativa estática que se celebró en el Instituto Ferial de Vigo (Ifevi) dejaron asombrados a los asistentes con la vistosidad y el ingenio de sus diseños, pero no pudieron marchar con todos sus vehículos y se quedaron con las ganas de lanzar los dulces. Así es que, aprovechando el retorno del sol, esta tarde se echaron a las calles de Navia para despedir la Navidad derrochando mágica alegría.
Treinta voluntarios de DisCamino, durante los dos últimos meses, recrearon un universos sobre ruedas con osos polares, trineos tirados por renos, unicornios, búhos blancos, galletas de jengibre, estrellas fugaces… Y, no podían faltar, los camellos para sus Majestades. Son los personajes del Cuento de Navidad de Lara, que han escrito para una de sus usuarias, de 15 años.
